A partir de hoy entramos en un nuevo escenario dentro del Estado de Alarma por el coronavirus. Empieza la desescalada y son precisamente los niños/as los que darán el primer paso. Pero, ¿Cómo hacerlo con garantías físicas y emocionales?
Pautas a seguir para disfrutar del aire libre con los más pequeños/as
1. Explícale las normas para poder salir con seguridad a la calle. Anticípate y explícale a tu hijo/a detalladamente que es lo que va ocurrir antes, durante y al regresar de la calle. Explícalo en positivo y ayúdale a entenderlas y aprenderlas. Corrobora que está entendiendo lo que le dices haciéndoles preguntas donde ellos sean los que tengan que explicar lo que les estas diciendo. De esta forma nos cercioraremos de que les ha quedado claro. Normas:
- Hay que lavarse las manos antes de salir y al regresar de la calle.
- Podemos caminar, correr y saltar pero NO podemos ir al parque.
- Podemos saludar a los amigos/as, pero desde lejos con una gesto con la mano, con la voz y/o una sonrisa en la cara. NO podemos acercarnos, ni tocar ni abrazar.
- Podemos salir una hora, pero tenemos que volver a casa cuando pase ese tiempo. Para los más pequeños podemos apoyarnos en un reloj digital para marcarles el tiempo del que disponemos para salir y anticipar 10 minutos antes de volver a casa que nos disponemos a regresar. De esta forma anticipamos una posible rabieta.
2. Prepárale emocionalmente. El cambio que va a experimentar al salir de casa con todas las normas nuevas va a generar un gran contraste entre lo que ellos/as conocían y la llamada “nueva normalidad”. Explicarles y anticiparles lo que verán les ayudará a que no genere un fuerte impacto en ellos/as. Hay que recordarles que tenemos que seguir siendo valientes para combatir el coronavirus y que con todas estas medidas lo conseguiremos. Explícale que:
- Hay poca gente.
- Casi ni hay coches por la calle.
- Hay colas para entrar en el súper.
- Todo el mundo lleva mascarilla y guantes.
3. Responder todas las preguntas que les puedan surgir sobre el COVID-19 de manera sencilla y trasmitiendo calma, y recordándoles que está en su poder protegerse lavándose las manos, tosiendo con el codo flexionado, etc.
4. Repasar las normas. Justo antes de salir de casa repasamos las normas con ellos/as. Los niños/as pequeños/as no recuerdan bien las cosas de un día a otro. El repaso también ayuda a mantener las normas activas en la salida lo que ayudará a prevenir enfados y rabietas. A los más pequeños/as ayudará el poner las normas de forma visual con fotos o imágenes, les ayudará a consolidar los conceptos.
5. Realicemos un recorrido inteligente sorteando los lugares conflictivos. Los estímulos visuales puede disparar reacciones emocionales fuertes. Si sospechamos que el niño/a puede tener una rabieta cuando pasemos por enfrente de un parque sería conveniente elegir un recorrido en el que no pueda ver el parque.
6. Estar pendientes durante el paseo de que se cumplen las medidas y tratar de corregir de manera afectuosa para que vaya adquiriendo las nuevas rutinas.
7. Evita rabietas. Utiliza una alarma para fijar la hora de regreso y de entrada a casa. Como comentábamos anteriormente un reloj analógico también ayudará a los más pequeños/as. Pon una alarma en tu reloj o teléfono. Explica al niño/a que cuando suene será momento de volver hacia casa. Pon otra para que sepa cuando estamos a punto de entrar en el portal. Son medidas objetivas y el niño/a las respetará mejor.
8. Ayúdale a procesarlo. Hablad de la salida al regresar a casa. Para procesar las impresiones fuertes y ayudar al niño/a integrarlas emocionalmente es importante conversar sobre lo que hemos visto. Utiliza preguntas abiertas como: “¿Cómo te has sentido?, “¿Qué te ha llamado la atención?», etc
¿Qué hago si no quiere salir a la calle?
Ante esta cuestión hay dos aspectos importantes. Por una parte, los niños/as tienen una gran capacidad de adaptación y muchos/as de ellos/as se han adaptado a la situación de confinamiento, por lo que tenemos que darles tiempo y respetar cuando estén preparados para salir a la calle. Les podemos proponer el salir cada día explicándoles los anteriores consejos y los beneficios de volver a disfrutar del aire libre. Respetando sus tiempos llegará un momento en que serán ellos/as quienes lo demanden.
Por otra parte, lo que puede ocurrir es que después de haber escuchado durante tanto tiempo hablar del coronavirus, muertes… les da miedo salir de casa. Es importante explicarles a los niños/as que el paseo es una posibilidad, no una obligación. Si tienen temor o no desean salir, no forzar. Hacerlo más corto o interrumpirlo si lo piden. Ante esta situación es aconsejable seguir los siguientes pasos:
1. No les fuerces ni presiones. Si el niño/a tiene miedo, la mejor manera de darle seguridad es hacerle sentir respetado y comprendido. No le fuerces.
2. Evalúa sus miedos. ¿Qué es lo que le da miedo?: ¿el virus?, ¿la policía?, ¿contagiar a alguien?, ¿qué le riñan?…
3. Desmonta sus miedos con calma y cariño.
- “Ya no hay casi bichitos”.
- “La policía ha dicho que ya podemos salir. No nos regañarán”.
- “Nadie te va a gritar o enfadar contigo”.
4. Comparte tus emociones. Los/as niños/as se contagia emocionalmente de sus padres. Dile “Yo tengo ganas de salir a la calle y pasear”.
5. Dale una prueba de realidad. Si todavía le cuesta, no le fuerces. Invítale a asomarse al balcón o la tele a ver otros niños/as pasear. Les ayudará a ganar confianza para el día siguiente.
En esta web http://www.mipsicologainfantil.es/ podéis descargar un cuento “El oso goloso” (clicando en la imagen) para leer a vuestros hijos/as. También lo podéis encontrar en nuestra página de Facebook. Se trata de un estupendo libro en el que aparecen las normas a seguir y que pueden hacer los niños/as en las salidas de la mano de un simpático oso.
Para más información no dudes en contactar llamando o escribiendo un Whatsapp a 636090517 o escribiendo un e-mail a info@renaixcentrepsicologia.com, estaremos encantados de poder ayudarte a ti y a tu hijo/a en lo que necesitéis. ¡Disfrutar del domingo y de la salida!